"¿Qué habría sido de Masueco si este Seminario no se hubiera cerrado? Seguro que habría sido otro su devenir y que su historia hubiera sido mucho más brillante pero... estaría así dispuesto en su hoja de ruta."
Empiezo con esta interesante reflexión que nos lanzan las palabras de Doña Consuelo, antigua maestra de Masueco e incansable investigadora del municipio y, de todo, lo que en él acontece. El pasado jueves, día 28, se llevo a cabo un homenaje a Martín Cubilano, hijo de Masueco que fundó el Seminario cuando todavía no existían centros de enseñanza en los pueblos. Anterior al de Salamanca y Ciudad Rodrígo en más de sesenta años, fue uno de los cuatro primeros seminarios conciliares de España. Elevado a seminario conciliar en 1717 por Bula del Papa Clemente XI. Además de centro de enseñanza, era obra pía, religiosa, benéfica que dejaba establecidas limosnas en días festivos, dotaciones para huérfanas y otras ayudas. Dejó una fortuna suficiente para su sostenimiento, pero se suprimió indebidamente, se enajenaron bienes que el fundador dejaba exclusivamente en su testamento, para Masueco. Bienes que fueron vendidos. Este colegio estuvo funcionando más de doscientos años.
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