Izquierda, padre Miguel Ruano. Esquina derecha, el antiguo secretario, Santos, marido de Doña Consuelo. Arriba, Manoli y Nati. En la fila de abajo, la segunda es Chari y la cuarta ( si no me equivoco ) es Porfi.
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El padre Miguel Ruano, llegó a Masueco un 5 de octubre de 1968, después de estar varios años en la iglesia de Sahagún, en Salamanca. El cambio fue considerable, de la ciudad al pueblo, además cuando llegó a Masueco, la iglesia estaba sin techo, y todavía la impresión fue mayor. Pero enseguida se adaptó a la nueva situación. Y hoy, no cambia aquella experiencia por nada, porque guarda un buen recuerdo de los seis años que estuvo en este municipio. La situación demográfica del pueblo no tiene nada que ver con la actual. Recuerda que había muchísimos jóvenes y cuatro escuelas. Daban clases por la noche y, entre todos los asistentes, se creó un maravilloso ambiente. Él dormía en la casa del cura, que por aquel entonces era el teleclub, donde había una sala para ver la TV, un futbolín, pin pon... También recuerda que pasaba mucho frío. El padre Miguel es de un pueblo cercano a Ledesma, Villaseco de Los Reyes, aunque vive en Salamanca. El padre Antonio Ruano fue el que siguió al padre Miguel, y pasó en Masueco diez años de su vida. Antonio es natural de la sierra, concretamente de La Alberca, y al igual que Miguel, guarda muy gratos recuerdos de su estancia en Masueco. Es un placer hablar con él ( en realidad con los dos ), que también me comenta la gran cantidad de jóvenes que había en el pueblo. Él estuvo viviendo en la casa que hay al lado del ayuntamiento viejo. En un momento de la charla, Chari me muestra esta curiosa fotografía que fue tomada hace unos 37 años aproximadamente, según el padre Miguel. En ella podemos ver diferentes rostros conocidos, como el del propio padre Miguel, el de Chari, el de Nati, el de Manoli Carretero, el de Porfi y un largo etcétera. Por cierto, preciosa fotografía. ¡ Qué tiempos aquellos !!!!!,,,,,,,
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2 comentarios:
Delfi. ¡LLegó de nuevo a Masueco Miguel Ruano! Pionero de curas modernos, trabajador incansable, aperturista, colaborador con la enseñanza, ya que en Aldeadávila insttruyó en la materia de religión y en Masueco de cultura.
En la labor pastoral, se acercaba a las casas para visitar a los enfermos. Yo le recordaba que en mi casa estando enferma en cama mi madres, nos hizo misa y ella se quedó maravillada del sacramento de la extremaunción que él aplicó, pues decía que sus oraciones pedía por su curación.
Trabajos en la iglesia, donde con poco dinero tuvo que ingeniarselas para ayudar a levantar el tejado caído cuando el llegó, haciendo corridas de tors, boxeo...
Ahí en otra faceta de introucir el deporte en la jueventud
Merece el reconocimiento de nuestro Pueblo
Hola Delfi; la verdad es que me pareció un hombre encantador y muy dinámico por lo que me contaba, pero no creí que tanto. Gracias por tu aportación querida Delfi. Maite.
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